El ejercicio es una parte importante de un estilo de vida saludable. Ayuda a mantener el peso, mejora el estado de ánimo, reduce el riesgo de enfermedades crónicas y aumenta la energía. Pero ¿cuánto ejercicio deben hacer los adultos para obtener estos beneficios?
Cuánto ejercicio hacer según la OMS
Según las pautas de actividad física para los adultos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los adultos deben hacer al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa cada semana.
Esto es equivalente a aproximadamente 30 minutos al día, cinco días a la semana, de actividad física moderada, como caminar a paso ligero, andar en bicicleta o bailar, o 25 minutos al día, tres días a la semana, de actividad física vigorosa, como correr, nadar o hacer entrenamiento de fuerza.
Sin embargo, si los adultos quieren obtener mayores beneficios para la salud, la OMS recomienda aumentar la cantidad de actividad física a 300 minutos de actividad física moderada o 150 minutos de actividad física vigorosa cada semana. Además, se recomienda incluir ejercicios de fortalecimiento muscular al menos dos días a la semana, con el fin de trabajar todos los grupos musculares principales.
Es importante señalar que la cantidad de ejercicio que se necesita puede variar según la edad, la condición física y la salud general de cada persona. Por ejemplo, los adultos mayores pueden necesitar hacer ejercicios de equilibrio y flexibilidad para prevenir caídas y mantener la movilidad. Las personas con enfermedades crónicas pueden necesitar ajustar su programa de ejercicio para evitar complicaciones.
¡Se me hace cuesta arriba!
Además, es importante recordar que cualquier cantidad de actividad física es mejor que ninguna. Los adultos que no pueden cumplir con las pautas de la OMS pueden comenzar con pequeñas cantidades de actividad física y aumentar gradualmente la cantidad y la intensidad a medida que se sientan más cómodos.
Incluso los adultos que no pueden hacer actividad física moderada o vigorosa pueden beneficiarse de actividades más suaves, como caminar lentamente, hacer tareas domésticas y jardinería.
En general, los adultos deben elegir actividades físicas que disfruten y que se ajusten a sus capacidades y horarios. Por ejemplo, si alguien no disfruta de correr, puede optar por nadar o bailar en su lugar. Si alguien tiene un horario ocupado, puede hacer ejercicio en intervalos cortos durante todo el día, como caminar en el almuerzo o subir por las escaleras en lugar del ascensor.
Así que los adultos deben hacer al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa cada semana, con ejercicios de fortalecimiento muscular al menos dos días a la semana. Si los adultos quieren obtener mayores beneficios para la salud, pueden aumentar la cantidad de actividad física a 300 minutos de actividad física moderada o 150 minutos de actividad física vigorosa cada semana.